Se consideran alimentos funcionales aquellos que, con independencia de aportar nutrientes, han demostrado científicamente que afectan beneficiosamente a una o varias funciones del organismo, de manera que proporcionan un mejor estado de salud y bienestar.
Suelen estar enriquecidos en determinados minerales, vitaminas, ácidos grasos poliinsaturados (omega 3 y omega 6), etc.
Un alimento funcional debe presentarse como un alimento normal y deberá demostrar científicamente sus efectos beneficiosos en la cantidad en que se consumiría normalmente en una dieta equilibrada.
El alimento funcional, junto con una dieta equilibrada y una vida saludable, puede contribuir a mejorar la salud.
Los alimentos funcionales no curan enfermedades, aunque si contribuyen a una mejora de la salud.
*Si quieres más información sobre alimentos funcionales y cuales podrían ser mejores para ti, no dudes en preguntarnos.